El ex -guardameta azulgrana acabo con su vida en un intento logrado de saltar a las vías del tren, triste final para un buen profesional que estaba en la cima de su carrera.
Jugador depresivo, dado que podía ser un persona entrañable, era demasiado pesimista, esto le conllevo a una depresión, que continuo agravándose por la muerte de su hija y por una infección bacteriana, Enke supo disimular a su aflicción emocional a su actual equipo el Hannover 96.
Es difícil valorar como un jugador de futbol de 32 años, reconocido en su País y con una vida aparentemente satisfactoria, puede acabar de esta forma, a veces ni nosotros mismos entendemos el significado de nuestras acciones, que nos conllevan a realizar cualquier acto inexplicable para la razón de algunos humanos.
Robert Enke, nos recuerda que en el mundo del futbol como en cualquier otro sector profesional o social, las personas no son muy diferentes, todos podemos sufrir una depresión e incluso algunos pueden pensar en acabar con su vida, aunque sea algo que nunca me plantearía; hay que recordar a Enke de la mejor forma posible: unos por su cariño, otros por su amistad, algunos más por su compañerismo, otros por su actuación deportiva… pero como acostumbra a pasar últimamente el mundo del futbol queda tapado con un velo negro…
…Gracias Enke, el mundo del futbol llora tu perdida y da el pésame a toda su familia!!!
-Miki-
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